martes, 9 de septiembre de 2008

RESUCITAR O MORIR

RESUCITAR O MORIR

Desde aquel gris mayo en el que se consumó el descenso a los suburbios del fútbol de élite a hoy han pasado tres meses. En este tiempo el Zaragoza ha cambiado de cara, el discurso es el esperado por parte de los responsables del club y sus actuaciones han dado reflejo de lo que pretenden. No es otra cosa que el ascenso inmediato. Para ello han contratado a uno de los entrenadores más pretendidos del plantel europeo, Marcelino García Toral. A su disposición le han puesto una plantilla que no se ha podido cerrar hasta el último día del mercado estival, en el cual los intereses del Zaragoza tuvieron que ceder ante las exigencias de los clubes que negociaban con él. Nadie teme a Agapito y sus millones, nadie teme a un equipo de segunda.

Después de una pretemporada con muchas dudas el equipo ha empezado como acabó la temporada pasada. Incapaz de ganar, débil en defensa, sin creatividad y sin acierto. No hay que negar que Marcelino no ha podido trabajar con la plantilla completa durante todo el verano, pero siguen estando jugadores de un supuesto “alto nivel” que siguen sin responder. En tres partidos dos derrotas y un empate. Una de las derrotas ha supuesto la eliminación de la copa. A la afición maña sólo le queda resignarse a sufrir en un año que se espera infernal, donde los grandes objetivos quedan en los sueños, lejos de la realidad pasmosa que es estar en segunda división.

El león está hambriento de gloria, intenta luchar contra la ansiedad. Sólo se podrá salvar si la afición le vuelve a dar ese último aliento. Sólo la grada y el compromiso de los futbolistas le pueden devolver las garras a este felino deshonrado.

P. de Tomás

LA MALDICIÓN DE LOS PURPLE AHOGÓ A LOS MAIDEN

LA MALDICIÓN DE LOS PURPLE AHOGÓ A LOS MAIDEN.

Este verano Zaragoza iba a ser una de las capitales europeas del Heavy Metal con dos carteles muy poderosos y atrayentes. El Monster of Rock traía como plato fuerte a Deep Purple, Twister Sister y Saxon, entre otros, y encabezaban el cartel del Metalway del día siguiente grupos como Slayer, Iron Maiden y Avantasia. Un buen menú para millares de personas que adquirieron su entrada y acudieron a la capital maña desde diferentes puntos de España.

Pero el viernes, cuando iban a comenzar Deep Purple su actuación, una tormenta descargó sobre el recinto ferial como no se había visto en mucho tiempo. Lo que se denomina una tormenta de verano con efectos multiplicados. El viento hizo volar una chapa del escenario que fue a parar a un espectador, la lluvia se convirtió en granizo y los equipos de luz y sonido se quedaron inutilizables. Tal y como ocurriera con la última vez que los Purple vinieron a Zaragoza, un temporal hizo suspender el concierto y eso que aquella vez tocaban a cubierto. Pero calló un agua de tal magnitud que inundó el pabellón Príncipe Felipe. La organización comunicó a los asistentes la noticia y se pusieron manos a la obra para salvar el Metalway, pero no pudieron hacer nada. El escenario estaba muy dañado y no podía soportar el peso de un show como el de Iron Maiden. A las 10 de la mañana era oficial la suspensión del festival.

A la semana devolvieron el importe íntegro de las entradas, pero lo que no devolvieron fue la ilusión de muchos de poder ver a Maiden, los cuales ni siquiera aterrizaron en Zaragoza, publicaron una nota de prensa en su página web y pusieron rumbo directo a tierras escandinavas para seguir su tour.

P. de Tomás

VERANO MADE IN HOLLYWOOD

VERANO MADE IN HOLLYWOOD

No se recuerda ningún verano tan productivo como este en la factoría hollywoodiense. Tantas películas destinadas a reventar la taquilla que han conseguido, no sólo eso, sino también salir bien paradas de las plumas de los críticos. Algunos muy escépticos que siempre miran con mucho desinterés las historias fantásticas y de supehéroes, este año se han sorprendido.

Todo empezó en la antesala del verano, en mayo las principales productoras empezaron a cargar sus pistolas. La llegada de Indiana Jones y su última aventura hacía preveer que pocas películas la superarían en taquilla pero no fue así. Marvel sorprendió a todo el mundo con Iron Man y posteriormente la nueva entrega de Hulk, nuevos aires a una franquicia que se empezaba a desgastar y que ha dejado atrás producciones tan mediocres como Daredevil, Elektra o el último Spiderman que empeora (si es posible) a sus predecesoras. Con este nuevo tinte buscan empezar una nueva franquicia y desempolvar a algunos de sus personajes que estaban olvidados en el papel.

Con todo esto el verano empezaba de lo lindo para los grandes magnates, reunir los gustos de la crítica y el público en un mismo producto de estas características era algo casi inaudito, pero agosto traía su plato fuerte: El Caballero Oscuro. La nueva entrega de Batman con el malogrado Heath Ledger como gran estrella en el papel de Joker. No se muy bien si fue el interés en ver a este actor en su mejor y último papel (los rumores de Oscar lo confirman) o la propia calidad de la cinta, pero desde su primer día en cartel ha arrasado y se ha colocado en el primer puesto del ranking veraniego. Quedará todavía lejos del Titanic de James Cameron, pero si como una de las más taquilleras de la historia.

Por supuesto, un verano no podría denominarse como tal sin las películas animadas de rigor. En este caso Kung Fu Panda de Dream Works consiguió unos resultados muy satisfactorios pero no ha podido hacer sombra a la que algunos consideran como una de las mejores películas del siglo XXI, Wall-E, la gran obra maestra de Pixar. Todo un derroche de talento e imaginación, esta vez destinado a un público no tan infantil, lo cual se agradece y mucho.

P.de Tomás